El obispo diocesano de la Iglesia en Magallanes, Óscar Blanco Martínez, presentó hoy a la comunidad su primera Carta del Pastor con ocasión de la próxima conmemoración de los 50 años del golpe de estado del 11 de septiembre de 1973, conmemoración que tensiona la vida de toda nuestra sociedad, y que polariza las valoraciones que se hacen del acontecimiento.
Invita a a todos los cristianos y a los que no tienen el don de la fe y que son personas de buena voluntad, a mirar con serenidad cómo toca nuestras vidas y relaciones.
Por eso, señala, hacer memoria es una exigencia y responsabilidad de ciudadanos, para ir haciendo un país que, con lucidez e ilusión, construye su presente y su futuro. Por cierto, hay diversas interpretaciones del acontecimiento y de los hechos que lo desencadenaron, pero esas lecturas divergentes no pueden paralizar la búsqueda de caminos que se puedan recorrer juntos como sociedad y como país.
Se necesita hacer una memoria sanadora, superando las distorsiones que pueden ser el olvido, la negación de lo sucedido, o el recordar con rencor y deseos de venganza. Todas esas son manifestaciones de una mala memoria, porque la historia no se puede negar, no se puede borrar, y tampoco puede quedar detenida en un pasado doloroso, ni cerrada al futuro por la falta de la necesaria autocrítica que todos tenemos que hacer.
Lo decisivo ante las heridas de la historia es, siempre, una decisión de perdón y reconciliación. Este es un punto central de la reflexión del obispo de Punta Arenas: la decisión del perdón, tanto de pedir perdón como de ofrecer el perdón, es lo único que puede sanar las heridas de la historia. El perdón “de corazón” es una decisión libre de cada persona que nace de experiencias y convicciones más fuertes que el dolor de las heridas. La fe de los cristianos en el Señor Jesús, que vivió y murió perdonando, es nuestra razón más fuerte para el perdón y la reconciliación. Y también, los que no tienen el don de la fe y están llenos de buena voluntad, pueden encontrar en su amor a los demás y al país, esas razones para el perdón más fuertes que el dolor de las heridas.
Hay que decir “nunca más” a todo lo destructivo e inhumano que hemos vivido en nuestra historia y que nos condujo a esta dolorosa conmemoración, pero para que el “nunca más” sea fecundo tenemos que aprender juntos que “hoy más que nunca” es la ocasión de ir construyendo un futuro que nos llene de esperanza a todos.
El Pastor de la Iglesia de Magallanes quiere compartir esta reflexión, porque hacer memoria es, “hoy más que nunca”, la ocasión de asumir en común un compromiso de encuentro democrático, de sanación de las heridas por el perdón, y de construir juntos una patria acogedora para todos. Esta es la condición para enfrentar creativamente, con los esfuerzos necesarios y con esperanza, los retos y desafíos del tiempo que hoy nos toca vivir.
También le puede interesar:
HA PARTIDO A LA CASA DEL PADRE DIOS, EL HERMANO COADJUTOR SALESIANO ULDARICIO CÁRDENAS
En la noche del martes 18 de junio falleció el hermano coadjutor Uldaricio Cárdenas, a los 93 años de edad y 73 de vida religiosa. Don Uldaricio desarrolló su misión realizando diversos servicios en las casas de Talca, Valdivia y, sobre todo, en las comunidades de...
MISA CON PARTICIPACIÓN DE HERMANOS DE RAPA NUI EN EL SANTUARIO JESÚS NAZARENO
El domingo 23 de junio el Santuario de Jesús Nazareno recibió la visita de una delegación de la comunidad católica de Rapa Nui, quienes compartieron su fe con una de sus identidades más características, el canto. La Eucaristía fue presidida por el P. Bernardo...
FELIZ ANIVERSARIO QUERIDA COMUNA DE PORVENIR: 130 AÑOS DE VIDA
Con presencia de las autoridades comunales, provinciales y regionales, en el Antiguo Templo, se celebró el tradicional Te Deum de Acción de Gracias por los 130 años de fundación de la Comuna de Porvenir. Un momento de oración para agradecer y pedir a Dios la...
BAUTISMO DE ALUMNAS DE PRE-BASICA Y SEGUNDO CICLO DEL INSTITUTO SAGRADA FAMILIA
Con alegría el sábado 22 de junio, 12 niñas recibieron el sacramento del Bautismo. Su catequista Sor Victoria González y el capellán P. Pablo Vargas fueron los encargados de acompañar las catequesis y la celebración (www.insafa.cl).También le puede interesar:Recuerde...
Recuerde seguirnos en nuestras redes sociales